Después de seguir a aquella mujer de gabardina me vino una duda que nunca hubiera tenido de no ser por aquellas huellas, el pie descalzo de la mujer me decía que no se encontraba en la escena, solo observo desde lejos los acontecimientos según supuse.
Una vez mas he seguido la pista errónea, pero se que alcanzarla me dará mas indicios de aquel ladrón.
¿Como se que ella no es la ladrona?, muy simple, la persona que cometió el acto de vandalismo portaba unas pequeñas botas de tacón alto, contrario de la mujer que seguí.
Ademas de una inigualable y delicada loción olor jazmín y rosas.
Pasaron tres días desde el acontecimiento, logre dar con la mujer de la gabardina, no era mas que una vagabunda que vivía bajo un puente de la ciudad, calentándose con una fogata de basura, gritando al cielo el por que la maldijo de esa manera, llorando y esperando a ser rescatada por los ángeles, de seguro una mujer muy devota a su religión pues portaba un cristo al cuello, la lleve a un lugar seguro y le ordene comida, le pregunte que vio aquella noche, me contesto,
-Una mujer asesinó al guardia rodeando su cuello, entro a toda prisa y en menos de 5 minutos se llevo un paquete. Eso es todo lo que logro decir antes de comenzar a desvariar sobre ser inocente, la lleve a un albergue cercano le di un par de sandalias y le agradecí con unas monedas por la poca información que me concedió, con tan poca información no me podía dar el lujo de darle mas dinero.
Dos días después del atraco alguien infiltro información de el dichoso paquete que habían robado, -Señor ese paquete es muy importante, contiene una formula para realizar la droga mas poderosa y alucinante, esto significaría todo una revolución en el narcotráfico donde quien tenga la formula controlara el mercado negro en cuanto a drogas. Una vez dicho esto colgaron y guarde mi teléfono celular, me encontraba solamente con unas cuantas pistas, una mujer que usa botas pequeñas, el olor que dejó y lo mas importante, el contenido del paquete.
Regrese a la escena del crimen, logre hallar una finísima cuerda con la que se ahorco al guardia escondida bajo una maceta, ingeniosa chica, un error fatal fue quitarle la placa al policía y ocultarla en la tierra de la maceta dejando en ella un huella digital, lastima que no la pudiera comparar en el sistema, me encontraba suspendido, sin arma, portando en mi chaqueta una botella de whisky para afianzarme en cada paso que daba, para no recordar las escenas por las que fui suspendido.
Momentos mas tarde recordé.
¿Como era posible?, ¿como me iba a olvidar de ella?, Fernanda la única amiga que tengo dentro del departamento.
Sin duda una mujer hermosa, con gran carácter y una fina voz angelical, se ha sabido colocar y sabe hacer su trabajo a la perfección.
La contacte y comente lo sucedido, se enojo, vaya sorpresa, no tendría que estar en el caso, aun así me ayudo. Le dije que buscara la huella en el sistema era ya el sexto día desde el robo de la formula. Ella con tanto gusto respondió a mi llamado y para mi mala suerte me informo que la vandálica mujer de botas de taco y perfume olor a jazmin y rosas no existía en el sistema, a cambio de ayuda futura me pidió que la tuviera informada de como iba resolviendo el caso...
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